Hace
unos días, y tras haber visto el tráiler, fui al cine a ver ''Brave,
indomable'' convencida de que sería una buena película. Y decepción la
que me llevé. Calificada como película para todos los públicos,
''Brave'' cuenta la historia de Mérida, una princesa de la Escocia en
tiempos remotos, que quiere cambiar su destino como mujer, luchando pese
a todo por tener un futuro y una vida libre fuera del rol tradicional
femenino. La transmisión de ese mensaje es totalmente acertada, pero la
fuerza de él no supera a la cantidad de escenas violentas y de pelea masculina que se dan durante los 100 minutos que dura.
Siendo para todos los públicos, no me parece nada correcto el alto nivel de escenas de ese tipo, para empezar, porque los niños IMITAN.
Y si en una película ven pelea y discusiones por cosas realmente
absurdas como en la película, ese mensaje ''subliminal'' les queda
grabado en la mente y lo reproducen posteriormente. Es una película que enfatiza el rol tradicional masculino (poder, fuerza física, violencia, impulsividad) así como el uso de la pelea para ''solucionar las cosas'', aunque al final todos acaban comprendiendo que ''es mejor ser hermanos''.
Entiendo y supongo que el objetivo de los creadores era escenificar de forma realista la Escocia de esas épocas antiguas, pero olvidaron
algo tan importante y sencillo como que un niño de 4 o 5 años NO es
capaz de comprender que esa forma de actuar pertenece al pasado, a otra
forma de vida antigua ya descartada. El niño lo toma por verdadero.
Además,
el continuo deseo del rey Fergus por matar al oso que le quitó su
pierna también es una invitación indirecta al trato inadecuado de los
animales. En la parte final de la película se ve perfectamente como,
a posta, le tiran al gran oso (al que caracterizan como malo y casi
diabólico) una enorme piedra para acabar efectivamente con él (no digo que los osos sean angelitos, obvio que hay que tener mucho cuidado con ellos, pero sin llegar al maltrato). Al salir del cine, reflexionamos con mi prima de 7 años y todas estuvimos de acuerdo en lo que he comentado anteriormente.
Aun así, de todo hay que sacar aspectos positivos y esta película las tiene: la
liberalización de Mérida como mujer, la importancia de la relación
padres-hijos y de la familia, el poder de la reconciliación y el amor,
el toque de humor...
Pero en definitiva, creo que esta película debería ser apta para mayores de 8 años.
La pelicula me parece precioca
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